Si hacemos un repaso a las contraseñas que utilizamos a lo largo del día, nos daríamos cuenta de la enorme cantidad de claves que nos hacen falta: para encender el smartphone, la del ordenador del trabajo, para sacar dinero del cajero… Y si a esto le añadimos que tenemos una vivienda con controles de seguridad que necesitan un código… ¡ya es para volverse loco!
Existen numerosos consejos sobre cómo establecer la contraseña más segura: que no repitas las que uses en otras sistemas, que combinen letras y números, que no sea tu fecha de nacimiento, etc. Bueno, pues ha llegado el momento de olvidarse de tanto esfuerzo creativo y recurrir a algo que no se nos olvidará nunca: nuestro propio cuerpo.
En el caso de los hogares con sistemas de seguridad integrales, ya existe la posibilidad de recurrir a las huellas digitales (altamente improbable que se repitan en otro ser humano), al iris e incluso a otros patrones biométricos que nos garantizan la privacidad a la hora de activar o desactivar los elementos de vigilancia que hayamos instalado en casa. En Altatec Seguridad empleamos el sistema biométrico para los controles de accesos, de esta forma eliminamos la posibilidad de que el robo o extravío de una tarjeta inteligente o mando inalámbrico, ponga en riesgo la seguridad de la comunidad de propietarios.
Desde luego es una opción muy interesante a tener en cuenta cuando vayamos a elegir el sistema de seguridad inteligente para nuestra casa o comunidad de propietarios. Además, al seleccionar la empresa de seguridad con la que queremos trabajar, el saber si cuentan con este tipo de servicios, nos permitirá averiguar si verdaderamente está a la altura tecnológica y de innovación necesaria para garantizar un trabajo a la altura de nuestras necesidades.
Por cierto, ya han aparecido propuestas por parte de algunas compañías del mundo online que proponen los injertos en el cuerpo como solución a la identificación en Internet. Y vosotros ¿estaríais dispuestos a implantaros un chip bajo la piel?