¿Quieres conocer qué clase de robos son los más frecuentes en nuestro país? Lo entendemos, los datos que se han conocido del pasado año sobre robos y criminalidad son escandalosos. El año pasado en España se produjeron 113.452 robos en casas, lo que denota un aumento de un 6% respecto al año anterior y supone una media de 300 robos al día.
Y es que según los datos oficiales del Ministerio del Interior que se han hecho públicos, la provincia de Barcelona y la Comunidad de Madrid se encuentran encabezando esta lista con un total de 16.367 y 15.913 delitos cada una.
En cuanto a los porcentajes de criminalidad en las calles, éstos han disminuido aunque cada vez se profesionalizan y sofistican más los robos. Como expertos en seguridad para comunidades de vecinos, hacemos una selección de los 10 tipos de robos más habituales.
Los principales tipos de robos y hurtos en España en 2026
1. Robo con fuerza en viviendas
Es uno de los métodos más habituales: forzar ventanas, balcones o puertas desde zonas discretas del edificio. Suelen elegir accesos secundarios, patios interiores o plantas bajas.
Medidas eficaces:
Refuerzos en cerraduras y bombines, sensores en puntos de acceso y, sobre todo, un perímetro vigilado mediante cámaras. En comunidades, disponer de un control de accesos estable dificulta que personas ajenas merodeen por portales o zonas comunes. Las cámaras IP con visión nocturna y sistemas con batería propia de Altatec ayudan a mantener la seguridad incluso ante un corte eléctrico.
2. Atracos con violencia o intimidación
Los atracos en la calle siguen siendo una de las modalidades de robo más frecuentes: tirones, sustracción de móviles o bolsos en zonas muy transitadas o con mala iluminación.
Recomendación práctica:
Evitar calles conflictivas, llevar lo imprescindible a mano y usar bolsillos interiores. En garajes comunitarios, es conveniente no entrar ni salir distraído y asegurarse de que no accede nadie detrás de ti.
3. Robo de vehículos y robos en garajes comunitarios
Los garajes son un objetivo claro: ruedas, catalizadores, retrovisores o vehículos completos. En comunidades también es habitual que alguien aproveche la apertura de la puerta para colarse caminando detrás de un coche.
Cómo reducir este riesgo:
Cámaras con buena visión nocturna, sistemas de control de accesos que bloquean la entrada a personas no residentes y tecnología capaz de detectar intrusiones detrás de vehículos (una de las funciones más demandadas). Cuando ya ha habido incidentes, la combinación de control de accesos + cámara HD + supervisión diaria es la solución más efectiva.

4. Hurtos por descuido
Actúan en espacios abarrotados, normalmente en grupo, y se especializan en bolsos abiertos, mochilas o bolsillos traseros.
Prevención:
Bolsos cerrados y pegados al cuerpo, nada de mochilas en la espalda en lugares saturados y objetos de valor siempre en bolsillos internos.
5. Robo por el método “choque-choque”
Provocan un pequeño golpe en el coche. Cuando el conductor baja a comprobarlo, otro miembro del grupo aprovecha para vaciar el interior.
Consejo clave:
No dejar nada a la vista y no alejarse del coche al revisar un golpe menor. Aunque parezca una situación inofensiva, suele estar preparada.
6. Robo mediante escopolamina o “burundanga”
El ladrón introduce la sustancia en una bebida o alimento y, una vez afecta a la víctima, actúa sin resistencia.
Para evitarlo:
No aceptar bebidas de desconocidos y no perder de vista las propias consumiciones. Si aparece una sensación de desorientación repentina, hay que pedir ayuda de inmediato.
7. Skimming o clonación de tarjetas
Dispositivos camuflados en cajeros permiten copiar la banda magnética y registrar el PIN.
Buen hábito:
Utilizar cajeros interiores, cubrir el teclado con la mano y evitar aquellos que presenten elementos añadidos o poco habituales.
8. Estafa del “paquete chileno”
El delincuente “encuentra” un fajo de billetes — que en realidad son recortes de papel— e intenta convencer a la víctima para repartirlo si aporta sus propias pertenencias o dinero.
Lo esencial:
Nunca entregar cartera, dinero o joyas a desconocidos, y desconfiar de cualquier situación que implique dinero encontrado en la calle.
9. Robo por distracción en comercios
Mientras uno de los implicados entretiene al dependiente, otro sustrae dinero o productos.
Para prevenirlo:
Cámaras visibles, control del flujo de entrada y salida de personas y efectivo guardado en zonas no accesibles.
Robos más habituales en comunidades de vecinos y zonas comunes
En comunidades, los incidentes siguen un patrón muy concreto. Los más habituales son:
- Robos de vehículos o sustracción de ruedas en garajes.
- Forzado de puertas de acceso al portal.
- Vandalismo en zonas comunes.
- Robos en trasteros.
- Intrusiones aprovechando la apertura de puertas automáticas.
- Intentos de ocupación en viviendas deshabitadas.
La policía y los administradores de fincas señalan que gran parte de estos tipos de robo originan por la ausencia de cámaras y la falta de un control de accesos bien gestionado, lo que deja al edificio o a la víctima expuesta y sin registro de quién entra y quién sale.
Si quieres asegurar tu comunidad, no dudes en contactar con nosotros.
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Bibliografía: Periódico el Mundo - Epdata