El ordenador y otros dispositivos móviles se han convertido en un mueble más de la casa, en realidad casi en uno de los miembros más de la familia. Pero hay que tener cuidado con quién nos espía por la webcam ya que pueden convertirse en la puerta de entrada para ciberdelincuentes que quieren espiarnos en nuestra propia vivienda.
Las webcam, cámaras integradas o acopladas a los ordenadores, son el objetivo de algunos hackers que encuentran en este periférico una herramienta de control y grabación con la que pueden llegar a cometer delitos tan graves como la extorsión.
¡Debemos tener cuidado de quién nos espía por la webcam!
Este tipo de ciberdelicuentes buscan, en realidad, fotos o vídeos de sus víctimas, generalmente mujeres jóvenes, a las que chantajear con el material conseguido bajo amenaza de difundir su imagen en la Red. También tienen en su punto de mira claves y datos secretos de interés obtenidos a través del micrófono asociado a la webcam.
Aquí tienes cinco sencillos consejos de seguridad para evitar disgustos con la webcam:
- Situar el ordenador hacia un ángulo muerto: Cuando no se está utilizando el ordenador, conviene que su webcam está dirigida hacia un punto en el que, en caso de estar grabando, no capte ninguna imagen comprometida. Por supuesto, si es posible, no situar el PC en ningún lugar muy privado de la casa como puede ser el dormitorio.
- Cambiar las contraseñas: Sí, es verdad que bastante tenemos con recordar el PIN, la clave del banco, el número secreto de la tarjeta y otros encriptados más, pero de verdad que compensa variar las contraseñas de nuestros dispositivos para dificultar la entrada de los delincuentes online.
- Tapa la webcam: Hay gente que opta por pegar un trozo de papel o una pegatina. Ya existen otro tipo de dispositivos más sofisticados que evitan la violación de nuestra intimidad.
- Cuidado con quién hablas: Las conferencias a través de webcam, si son en la intimidad del hogar, casi mejor que solo sean con conocidos y gente de confianza.
- Mantén limpio el ordenador: Actualiza el antivirus y no navegues por páginas web poco seguras o de contenido dudoso. Nadie ‘infecta’ su portátil a propósito, pero evitar ciertos comportamientos en Internet nos evitarán una invasión de troyanos.
Como ves, no toda la videovigilancia busca tu tranquilidad. Eso mejor dejárselo a los profesionales.